Su fragilidad es su fuerza, y su fuerza es su fragilidad. Dispuestas en pleno centro de la instalación creada para el desfile de la colección de prêt-à-porter otoño-invierno 2024-2025 de Dior, etéreas bajo una luz dorada, como revistiendo cuerpos, las armaduras tenían una presencia onírica y extraña. Estas creaciones, que llevan por título Of Bodies, Armour and Cages, «De cuerpos, armaduras y jaulas», son fruto del imaginario de la artista india Shakuntala Kulkarni*, que actualmente reside en Bombay. Su experimentación en torno a este proyecto empezó en 2010: ella misma, cubierta con esas estructuras, se apostó inmóvil en los lugares donde pasó su infancia, escenarios en los que cierto estilo de vida estaba desapareciendo. De ese modo, metafóricamente, se presentaba como protectora de las tradiciones, de la historia y de la cultura. |
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Shakuntala Kulkarni creció en un entorno abierto y libre: «Mis padres, y también mis abuelos, eran personas letradas que miraban hacia el futuro. Nosotras, las tres hermanas, no fuimos discriminadas de ninguna forma en la familia, ni tampoco entre las amistades. Nuestros padres nos animaron a practicar deporte y a descubrir las artes y la danza clásica indias. Yo practiqué las artes del espectáculo, especialmente el teatro intimista, que me encantaba, y también aprendí dibujo y pintura». En aquel entorno privilegiado, con el paso del tiempo, adquirió conciencia de lo precaria que es la posición de la mujer. «Escuchando a mis amigas, y a través de mi propia experiencia, empecé a ver cómo, entre impedimentos y discriminación, las mujeres sufren molestias, incomodidad y desresponsabilización. He querido examinar cómo la cosificación conduce a atrocidades y a la violencia ejercida hacia el cuerpo de la mujer, generando miedo a moverse libremente por espacios públicos y privados. Para mí se imponía la necesidad de dar una respuesta a esas preocupaciones dándoles cabida en mi producción artística, a través de diversos medios y disciplinas y concibiendo obras interactivas». |